El chocolate con leche se ha convertido en una de las barras más vendidas, por eso su adaptación y mezcla ha sido uno de los grandes retos de los maestros chocolateros, frutos secos, confitados y macerados, son unos de los más encontrados y mezclados con este manjar.
El chocolate con leche es adaptable, es versátil, es una de las presentaciones más fáciles de unir con elementos externos, y en esas mezclas se obtienen resultados con sabores que nos dejan con un sabor de boca increíble, es una forma de mostrar la versatilidad de un chocolate, no para darle vida, sino para convertirlo en una golosina más comercial.
Catica cuenta con una barra de chocolate con leche y maní que se ha convertido en un fuerte ejemplar, es morder la barra de chocolate y encontrar la majestuosidad de dos grandes sabores que se unen para darnos una mezcla perfecta y apetecible con un sabor maleable y digerible por completo en el paladar, con toques de fuerza gracias a la alta concentración de chocolate que posee la barra pero perfectamente mezclada con el sabor del maní que resulta ser uno de los protagonistas en este caso.
Es observar una barra totalmente lisa en la superficie principal pero corrugada y alterada en la inferir donde observamos los grandes trozos de maní que posee, en cuanto a olor, no es otro que la mezcla de fuerza del cacao con la leche pero sumando el olor afrutado del maní, al consumirlo estamos probando un ejemplar que nos presenta Catica con mucho poder de deseo, y es que si cada elemento por separado es apetecible, imagínense si los casamos, se convierte en una unión totalmente irresistible.
Con un alto porcentaje de cacao, el chocolate con leche y maní, supera los estándares existentes en el mercado chocolatero, es el resultado de un arduo esfuerzo por dejar una barra de calidad hecha de materia prima nacional, que resalta lo venezolano, que muestra las grandezas de los frutos de una zona potencial de Venezuela, como lo es Cata, es demostrar la versatilidad de la tierra a través de solo 50 gramos de una barra que te muestra la magnificencia del suelo venezolano en cuanto a, sabor, olor y color, probar una barra de chocolate Catica no es otra cosa que realizar un viaje lleno de inexplicables sensaciones que nunca antes podríamos haber tenido, es sentirse orgulloso de la calidad en productos venezolanos .
Por Luis Romero López
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